El Corona Fest se ha posicionado como uno de los festivales más importantes en nuestro país no solo por hacer una gira a lo largo de la república, sino porque siempre cuenta con la participación de bandas consolidadas. A diferencia de otros festivales, el Corona Music no es una plataforma para bandas independientes o novatas, simplemente ofrece un concierto con figuras de alto nivel nacional e internacional, pero siempre latinas. Caifanes fueron los encargados de cerrar esta edición, no sin antes probar los sonidos de las mejores bandas de México, Venezuela y Argentina.

El reggae siempre es una buena forma de iniciar un evento, es lento pero lo suficientemente bueno como para entrar en ambiente y que mejor que Los Pericos, banda que a lo largo de los años ha demostrado ser uno de los pioneros y favoritos en nuestro país.

Aunque no está permitido meter cualquier tipo de alimento o bebida en el festival, los chicos siempre se las ingenian para meter hierva de poder y mientras los argentinos tocaban sus mayores éxitos, el humo y el olor se expandía en el Azteca.

Hello Seahorse puso a bailar a los asistentes más jóvenes de la explanada, quienes al ritmo del disco Arrumina, se incluían en la masa de veteranos que esperaban el acto final.

La voz de Denise Gutiérrez dejo impacto en la audiencia, quienes aplaudían las notas más altas de la cantante. Hello Seahorse dedujo que son capaces de incluirse en la lista de las mejores bandas contemporáneas del país, pues con un acto que lleva de la melancolía al baile y un sonido fuerte, hace que el público caiga a sus pies.

La Gusana Ciega salió cuando el sol estaba en la cima, pero eso no importo para los miles de fans que esperaban su acto.

La Gusana Ciega tiene una trayectoria que no paso desapercibida, temas como Tornasol dejaban la piel chinita al escuchar el coro de las masas, pero las nuevas canciones como Ella Estrella hacia volar las pelotas de playa y por un santiamén todo fue goce que se liberaba poco a poco hasta el término de su presentación, cuyo fin dejo lista a la audiencia para la proyección de la final del mundial.

La transmisión de la final mundialistal, hizo que los chicos tomaran un respiro y pudieran acomodarse durante 2 horas; había aquellos que como si estuvieran en sus hogares, tomaron los sillones inflables que les dieron a la entrada y se desparramaron en ellos para disfrutar del futbol, mientras que otros aprovechaban la distracción para tomar los mejores lugares al continuar el concierto. Aún así, todos miraban las pantallas, playeras de Alemania, Argentina y ¿por qué no? México estuvieron presentes y aunque no hubo gol en el tiempo regular, todos estaban atentos a la gran final.

Los Amigos Invisibles tuvieron el reto más grande de la tarde, tocaban mientras que las pantallas del rincón aún proyectaban el tiempo extra de futbol. Los venezolanos invitaban al público a interactuar con ellos para que no se perdieran de su presencia, afortunadamente su música alegre y divertida hizo olvidar a los asistentes las pantallas y concentrarse plenamente en la fiesta que se llevaba a cabo en el escenario. Mentiras fue el sencillo que los salvo del fracaso y el gol cayó exactamente al finalizar su setlist.

Leonardo de Lozanne y Paco Huidobro salieron al escenario con su “nueva” alineación para tocar los éxitos que les dejo Fobia. Sea como sea, las canciones son las mismas y el público las recibía sin importar la ausencia de “Jay” o “Cha”. No Eres Yo, Veneno Vil y por supuesto Microbito, fue coreado por los 130 mil asistentes de la explanada del estadio, Fobia tiene temas que pasan la prueba de tiempo, no importa el año en el que estemos, sus canciones serán cantadas con la misma intensidad.

Al iniciar la ligera llovizna, salieron Los Ángeles Azules para hacer bailar hasta a los más rockeros, su participación en el festival abre la puerta a otros géneros y no dudemos que algún día participen Los Tigres del Norte, Intocable u otra banda con un género totalmente diferente al rock.

Mientras todos sacaban sus mejores pasos y le sacaban brillo a la pista, Kinky subió al escenario como invitado para tocar Como te voy a Olvidar, uno de los temas más coreados por la audiencia, pero sin duda su tema 17 años fue la bomba que hizo estallar el escenario durante su presentación.

Cuando el cielo volvió a despejarse, apareció DLD ante la audiencia inquieta que esperaba su llegada. El álbum Primario fue esencial en su setlist, Todo Cuenta, Viernes y Arsénico fueron temas eufóricos en el evento, sus letras de desamor fueron coreados con dolor y había uno que otro que cantaba con pura pasión.

El rock de los mexicanos y la interacción constante con su público hacia que la audiencia se volviera loca, los empujones y gritos estaban al 100%. Si el concierto estaba bueno, DLD hizo que subiera de nivel con sus exitosos temas.

La noche comenzaba a asomarse cuando Gil Cerezo salió al escenario y Kinky se enfrentaba a unos asistentes que se habían quedado con ganas de más, pero no hubo mayor problema porque los regios saben cómo continuar la fiesta. Su ambiente electrónico hizo que nuevamente la explanada se llenara de pelotas de playa, que las chicas se subieran en los hombros de sus acompañantes y comenzara la lluvia de basura; el festival termino por convertirse en un carnaval.

Para finalizar la noche, salieron Saúl Hernandez, Sabo Romo, Alfonso André y Diego Herrera para complacer a los 135 mil expectantes que ya se habían sumado a la explanada. Caifanes no se daba el gusto de defraudar a su raza y durante una hora tocaron éxito tras éxito.

Aquí ya no había jóvenes y adultos, ya no había diferencia entre generaciones, todos se volvían uno solo y como si fuesen un alma gigante, se encargaron de acompañar a Saúl en cada tema. Dentro de su setlist se abarcaron temas como: La Negra Tomasa, Viento, Los Dioses Ocultos, Antes De Que Nos Olviden, No Dejes Que y muchos más, la verdad es que Caifanes tiene la peculiaridad de que la mayoría de sus canciones son un éxito.

Los pioneros de la generación “rock en tu idioma” ya no tienen nada que demostrar, en esta como en otras de sus presentaciones hay una victoria asegurada.

Con un programa que cumplió los horarios, futbol, buena música, muchas chelas y precios prudentes, se termino el Corona Music, un día que cumplió expectativas y dejara retos que cumplir en su siguiente edición.

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Por Yuri Nava

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